CRISTOFARSA: MISIVA A UN FALSO DIOS

A la atención de:

EL CRISTO

Alias El Nazareno

Profesión:

Carpintero con labia

Sin domicilio fijo conocido

Para ser sincero, no tengo ni pajolera idea de como debo dirigirme a ti. ¿Debo hacerlo cómo excelentísimo, reverendísimo, amado y nunca del todo ponderado, señor don Cristo...? ¿Cómo don Jesús de Nazarét, hijo del dios judío Yahvé...? ¿Cómo príncipe de a saber qué reino...? ¿Tal vez, cómo señor don Cristo...? ¡Pues eso, que estoy hecho un lío! Lo mejor será que me dirija a ti, simple y llanamente, como Cristo a secas. De esta forma, ni le quito ni le añado adornos rimbombantes a tu nombre.

¿Quién eres tú? O mejor dicho, ¿qué eres en verdad, tú...? ¿Un personaje literario creado por Eusebio de Cesárea, para satisfacer las necesidades políticas del emperador romano Constantino? Te lo digo, porque muchos historiadores y escritores aportan pruebas fehacientes de ello. ¿O quizás, un guía de masas creado por el sanguinario, terrorífico e iracundo Yahvé, para darle fondo y forma a su segunda secta monoteísta? También los evangelios apócrifos, aportan pruebas de que puede ser así. Lo que si esta muy claro, es que solo grandes cantidades de dolor y angustia, le has aportado hasta la fecha a la humanidad.

Verás, Cristo; en tu nombre, la diabólica secta católica, nacida de tus supuestas prédicas, y otras sectas, nacidas a su vez de tan siniestra formación mafiosa, han realizado y siguen realizando todo tipo de aberraciones, atrocidades y maldades; Persecución de inocentes. Torturas. Genocidio. Asesinatos. Guerras... Y casi siempre, con fines de lucro y desmesuradas ansias de poder. ¿Y qué has hecho tú para evitarlo? Que se sepa, absolutamente nada. Da la impresión, si de verdad exististe, que al igual que a tu andrógino padre, te place el sufrimiento humano.

Te recuerdo, que el terrorífico Yahvé, tu supuesto padre, creó tres sectas monoteístas; judaísmo, cristianismo e islamismo, con el único fin de que los humanos guerreáramos entre nosotros, provocando millones de víctimas inocentes. Y no contento con eso, tuvo la macabra idea de lanzar sobre la indefensa humanidad a los cuatro jinetes de su particular apocalipsis, que con su funesto cabalgar, representan muy bien sus "divinas" intenciones; hambre, peste, guerra y muerte para los humanos.

Mira Cristo, seamos claros; si el tinglado que montaste fue con buena intención, cosa que dudo, la has cagado pero bien cagada. Tus seguidores, que lo sepas, han montado en tu nombre uno de los negocios más obscenos que parió madre. ¿Te acuerdas de los mercaderes del templo? Pues multiplica su materialismo alejado de toda espiritualidad por cien mil trillones y obtendrás una secta católica de tamaño natural, que para más INRI, practica la idolatría con fines de lucro. Ahora bien, si tu intención era la de crear multiNAZIonales dedicadas a embaucar a las masas y a violar de forma reiterada los derechos humanos, te felito, porque lo has bordado. Tu has sido y sigues siendo, al menos hasta el momento, el tonto útil del que se han servido un grupito de mafiosos carentes de los más elementales principios de ética y moral, para vivir como Dios a costa de la pobreza ajena. ¿Estas contento? o te jode que te lo recuerde.

Dicho esto, quedo en espera de tu respuesta.

CHE-CHU

¡Ah! ¿Que piensas dar la callada por respuesta, por que al igual que ocurre con otras muchas "divinidades" ni ves, ni oyes, ni sientes, ni padeces? Me lo temía, pero ten muy presente, que quien calla otorga.