Los resultados de las elecciones celebradas ayer lo dejan muy claro; nadie es más ciego, que el que no quiere ver. Después de 35 años ejerciendo el derecho al voto, ningún españolito perteneciente a las clases sociales menos favorecidas, puede excusarse diciendo que ha votado al Partido Franquista Popular o al Partido Antisocialista y Antiobrero Español, porque se acaba de caer del árbol y desconoce como se las gastan estas dos bandas mafio... Digooo... estos dos partidos políticos que se reparten el poder a nivel NAZIonal y que a vista de todos, no han escatimado esfuerzos para medrar, al tiempo que multiplicaban los impuestos indirectos en los productos de primera necesidad, recortaban los derechos de los trabajadores y fomentaban la tontocracia, la partidocracia y la corruptocracia, hasta límites insospechados.
A poco que hubieran reflexionado los ciudadanos de a pie de este país, habrían caído en la cuenta de que cada vez que le regalan un puto voto a la derecha representada por el mal llamado Partido Socialista o lo hacen al Partido Popular, que viniendo del franquismo, tiene una ideología fascista que nunca ha escondido, más se hunden en el fango.
En cuanto al futuro que nos espera, esto solo es el comienzo de una etapa que augura trabajo todavía más precario; menor poder adquisitivo de sueldos y pensiones; mayor acumulación de la riqueza en menos manos; y aumento de la pobreza y el hambre, para los de siempre.
Sobre el movimiento 15-M, decir que me temo que se esfuman las muchas esperanzas que había suscitado hace semana y media, al anunciar una posible fecha final de su protesta. Es cierto, que esto no ocurre en todos los casos, ya que también se escuchan voces que hablan de seguir en la lucha, hasta lograr la implantación de una democracia realmente participativa de todos los ciudadanos. También es cierto, que según están las cosas, si el movimiento 15-M pone ahora punto final a su protesta, no tardará en resurgir como más fuerza.
En lo referente a Bildu, el pronóstico de las encuestas se ha cumplido y con más de trescientos mil votos, se ha convertido en la segunda fuerza política del País Vasco. Ahora, hay que esperar que Bildu sea consecuente con sus principios democráticos y allí donde gobierne, lo haga de forma intachable, porque miles de ojos le van a estar observando día y noche. De momento, algo de lo que pueden presumir los, en otros tiempos, cargos electos pertenecientes a partidos políticos de la izquierda abertzale que han tenido la oportunidad de participar en política, es que nunca se han visto involucrados en casos de corrupción, lo cual dice mucho a su favor.
CHE-CHU
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